11 October, 2025
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Casi 300 mil pedidos de seguro por desempleo: reflejo de una economía en crisis

Casi 300 mil pedidos de seguro por desempleo: reflejo de una economía en crisis

Javier Milei asumió la presidencia del país el 10 de diciembre de 2023, hace 22 meses. Desde aquel momento comenzó a aplicar una serie de medidas económicas que terminaron con miles y miles de argentinos despedidos de sus trabajos. La cantidad de personas, solo del ámbito privado ascienden a 286.391, que son aquellas que solicitaron la Prestación por Desempleo

Este número -que no incluye a los trabajadores estatales- pone de relieve una realidad preocupante: el mercado laboral atraviesa un momento crítico, marcado por despidos masivos, ajuste económico y debilidad en la generación de empleo formal.

Cifras contundentes

  • Durante 2024, se registraron 335 solicitudes de seguro de desempleo.
  • En los primeros nueve meses de 2025, la cifra ya alcanza 056 casos.
  • Los sectores más afectados: industria manufacturera (26.060 solicitudes), comercio (23.098), construcción (18.776), actividades administrativas (12.228), entre otros.

Este contexto no es casual. Las políticas de ajuste, la apertura económica, la remoción de regulaciones laborales y los recortes en el sector público han generado un clima de vulnerabilidad laboral. Las empresas enfrentan mayores costos, presión financiera y caída en la demanda, lo que lleva a ajustes de personal como medida de supervivencia.

Estos datos implican distintas situaciones para el país. Por un lado, el desempleo formal creciente, que se confirma con casi 300 mil personas que recurren al seguro de desempleo en menos de dos años, es una clara evidencia del deterior significativo del empleo formal.

De igual manera se manifiesta la desigualdad y precarización laboral, donde el seguro de desempleo significa solo un paliativo temporal. La verdadera preocupación es la baja generación de empleo estable, con salarios dignos y cobertura social. La precariedad, el subempleo y la informalidad se perfilan como el escenario predominante.

En países con fuerte desigualdad como Argentina, las políticas de contención social cobran relevancia. Pero con recortes, ajuste y reducción del aparato público, la capacidad del Estado para absorber esta demanda social queda comprometida.

La alta desocupación, más inflación persistente, configura un caldo de cultivo para el descontento social. Sin dudas, el gobierno de Milei deberá equilibrar su discurso liberal con políticas de mitigación social, o enfrentar crecientes protestas y rechazo.

El dato de casi 300 mil solicitantes de seguro de desempleo no es solo una estadística más: es una señal de alerta estructural. Refleja la fragilidad de un mercado laboral que no pueda amortiguar los efectos del ajuste, y plantea interrogantes profundos sobre el modelo económico que Argentina viene adoptando.