Hace poco más de dos años se constituyó en Santiago del Estero una Cámara de Tecnología (CaTeSE). La idea parte de un grupo de profesionales amigos, interesados en potenciar el rubro y evitar que el conocimiento profesional, tan valioso en estos días, escape de la provincia.
Esteban Fares, presidente de este órgano, señala que son cada vez más los graduados que optan por trabajar para organizaciones del exterior, en caso de no tener oportunidades locales. Señala que, a menudo, los jóvenes talentos son contratados por empresas de afuera, de las cuales luego se importa software.
“Terminamos repitiendo el error de exportar la ‘materia prima’ que sería nuestro conocimiento e importar el producto terminado que serían los sistemas desarrollados”, argumenta el titular del organismo.

Por eso es que, una de las metas de la Cámara es animar al desarrollo de emprendimientos santiagueños, de modo que los sistemas, aplicaciones y/o startups se generen de manera local y abastezcan la demanda interna.
La Cámara tiene por socias a empresas privadas que desarrollen cualquier actividad tecnológica, pero también emprendedores del rubro que busquen afianzarse. Pues, una de las misiones de la organización es allanar el camino para acompañar la “transformación de emprendedor a empresario”.
La posibilidad de contacto entre profesionales con trayectoria, permite superar ágilmente las dificultades o “tropiezos” que puedan surgir. “Intentamos allanarle el camino compartiendo experiencias o facilitándoles contactos o lo que necesite en términos de proveedores, de contadores…”, ejemplificaba el ingeniero informático.

Ante la implementación de la Ley de Economía del Conocimiento, la Cámara está en condiciones de guiar a quienes deseen inscribirse en la normativa provincial. Pues, recordaba que en un principio les resultaba bastante engorroso registrarse; pero que compartiendo con otros profesionales, podían avanzar mucho más rápido.
“Se genera una sinergia; no solo ayudamos al que lo necesita, sino que todo el ecosistema se ve beneficiado porque crecemos de esa sinergia el uno con el otro. Lo que uno sabe hacer se complementa con lo que sabe hacer el otro y se llega a soluciones de mayor escala”, planteaba.
De acuerdo a su sitio web, la CaTeSE ya cuenta con más de 30 empresas adheridas,, más de 120 colaboradores. En los dos años que lleva en funcionamiento se lograron más de 60 soluciones y 10 convenios con el sector público y privado de la provincia.