El Banco Central de la República Argentina (BCRA) ha registrado una séptima jornada consecutiva con compra de divisas, reteniendo en el mercado unos USD 74 millones gracias a la liquidación del dólar agro. Sin embargo, además del ingreso de divisas por el tipo de cambio preferencial para el maíz y otras producciones regionales, otro factor clave ha contribuido a esta seguidilla de compras: la fuerte caída en las importaciones, causada por los nuevos impuestos aplicados a las compras de bienes y servicios del exterior.
De acuerdo a los datos del Mercado Único y Libre de Cambios (MULC), el promedio diario de importaciones se ha derrumbado un 75% desde la entrada en vigencia de las últimas medidas, que establecen un impuesto del 7,5% a las compras de bienes y del 25% a las de servicios. En los primeros siete días bajo el nuevo esquema, las importaciones promediaron USD 36 millones diarios, mientras que en el período previo al impuesto ascendían a unos USD 142 millones diarios.
Este frenazo en las importaciones es una tendencia característica cada vez que se implementan nuevas regulaciones, y su duración ha sido mayor de lo previsto en esta ocasión, en un contexto de escasez de reservas y la necesidad de afrontar pagos de deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
En respuesta a esta situación, el Gobierno ha buscado financiamiento externo, como el préstamo de USD 1.000 millones de la Corporación Andina de Fomento y el uso del primer tramo del swap chino, aunque se estima que el segundo tramo por USD 5.000 millones se utilizará para afrontar el vencimiento de intereses que se opera este viernes.
Ante la incertidumbre sobre la disponibilidad no solo de dólares sino también de yuanes, se espera que el flujo de importaciones se mantenga restringido en las próximas semanas, en línea con las exigencias del FMI para preservar las reservas brutas. La implementación de estas medidas ha generado un impacto significativo en el ingreso de divisas, lo que, combinado con la reducción de las importaciones, ha permitido al Banco Central revertir el saldo negativo en el mercado de cambios y acumular un superávit en los últimos días.
Aunque se espera que el ritmo de operaciones aumente en las próximas semanas, la incertidumbre sobre la duración de esta situación persiste, y el Gobierno deberá seguir monitoreando y tomando medidas para mantener la estabilidad y preservar las reservas internacionales.
