Avistamiento de aves: La actividad que atrae a cada vez más compatriotas y extranjeros
Pese a que no se trata de una actividad turística, aunque potencial no le falta, el avistamiento de aves suscitó la visita de numerosos compatriotas y extranjeros en distintas zonas de Santiago del Estero. El interés fue fomentado por el Club de Observadores de Aves (COA) Kakuy que se formó en 2020.
La rica y desconocida fauna provincial resulta de gran atractivo para los fanáticos de las aves. La buena noticia es que ahora tienen con quien compartir esta afición y pueden hacerlo de manera respetuosa con la naturaleza, sin alterar el ecosistema.
Rodolfo…uno de los integrantes del COA lleva un registro de los observadores que llegaron a la provincia en los últimos años para internarse en el monte y esperar a que algunas especies se revelaran. En 2019, cuando aún no se había constituido el club, la provincia recibió a siete extranjeros y 15 personas del resto del país.
El año pasado, vinieron 28 personas del exterior y unas 75 de otras provincias. “Nosotros adjudicamos esto a nuestra labor de difusión de las aves de Santiago del Estero y de nuestra labor, tanto dentro de Aves Argentinas (la organización que nuclea a observadores de todo el país), como en el resto de la comunidad de observadores de aves”, explica el referente.
Además, el número de observadores de nuestra provincia también creció y hoy son más de25 los que están en condiciones de actualizar el registro de aves, tanto de paso, como autóctonas. La mayoría, dice Rodolfo, están en la ciudad Capital y La Banda, pero también hay Termas de Río Hondo, Mailín, Guanaco Sombriana, Bandera Bajada, Pampa de los Guanacos, Herrera y demás.
¿Una opción turística?
Rodolfo aclara que el COA no hace turismo, pero que las “salidas” con observadores despertaron un interés a considerar en la cartera turística. De hecho, tuvieron la posibilidad de dialogar con autoridades de una localidad y con la Cámara de Turismo para evaluar su inclusión, como propuesta para los visitantes.
Por su parte, destacan la apertura para difundir opciones turísticas de la provincia, como así también a planificar salidas de avistamiento, junto a instituciones o gobiernos interesados.
El viaje más esperado
El fin de semana pasado José Navarro, Sergio Quinzio y Rodolfo, los tres integrantes de COA Kakuy, lograron llegar a uno de los sitios más codiciados para el avistamiento de aves. Se trata de los bañados del Río Dulce, más específicamente a la Laguna Los Porongos y otros espejos de agua de la zona a los que se procura resguardar próximamente.
“Estos son parte de un proyecto de Parque Nacional que continuaría la protección que se ha logrado en el Parque Nacional Ansenuza del lado cordobés”, explicaron. Es que significa un “hábitat vital” para las aves, “de los más importantes a nivel nacional e internacional”.
Ocurre que a estos bañados “llegan a anidar, descansar y continuar viaje aves que migran todos los años desde y hacia el hemisferio norte y que pasan por nuestra provincia”. “Debemos proteger estos espacios, y para ello es imprescindible conocerlos”, comentaron.
El viaje de los observadores, aunque muy “fatigoso”, sirvió para eso. Pudieron registrar la riqueza de aves, a través de fotos y las compartieron para que todos puedan conocer y valorar la Mesopotamia Santiagueña.