La Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación ha estimado que la inversión en capital de trabajo para la Campaña Agrícola 2023/24 alcanzará la impresionante cifra de US$ 24.230 millones, cubriendo una extensión de 38.973.000 hectáreas.
Este nuevo ciclo agrícola, que inició en junio con la siembra de trigo y cebada, contempla principalmente una superficie de 38.973.000 hectáreas destinadas a diferentes cultivos. Según las proyecciones de la Subsecretaría de Agricultura, la distribución de la inversión se distribuye de la siguiente manera: un 43,1 % para alquileres; un 15,8% para fitosanitarios; un 13% para fertilizantes; un 13,7% para semillas; un 14,2% para labores agrícolas y un 0,3% para riego.
Dentro de este panorama, los cultivos que lideran en inversión de capital de trabajo son la soja (de primera y segunda) con más de US$ 9.223 millones, seguido por el maíz con US$ 7.800 millones y el trigo con más de US$ 2.800 millones.
En cuanto a la superficie sembrada, se estima que 7,7 millones de hectáreas corresponden a la Cosecha Fina (trigo y cebada), mientras que 29,55 millones de hectáreas corresponden a la Cosecha Gruesa (maíz, soja, girasol y sorgo), y 1,7 millones de hectáreas están destinadas a cultivos como arroz, maní, algodón y legumbres.
Es relevante destacar que el 70% de la superficie sembrada está en manos de terceros. Si se suman los gastos de comercialización y cosecha (US$ 10.300 millones) y los necesarios para mantener la estructura de producción (US$ 6.000 millones), la suma total asciende a US$ 40.500 millones.
El secretario de Agricultura, Juan José Bahillo, ha resaltado la importancia de esta inversión para el desarrollo nacional y el compromiso de los productores con el crecimiento de Argentina. Según afirmó en su cuenta de Twitter, cuando más argentinos invierten, producen y trabajan, más prospera el país.
