La carne argentina busca certificar su sustentabilidad y satisfacer las demandas de los consumidores
La industria cárnica argentina se compromete a medir su huella ambiental como un paso clave para expandir su presencia en nuevos mercados. El Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA), el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) y el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) están colaborando en un proyecto para medir y certificar el impacto ambiental de la carne argentina de exportación.
Durante una jornada técnica en Córdoba, se presentó un acuerdo que busca implementar una “declaración ambiental de producto” para certificar la sustentabilidad de la carne argentina. El objetivo no se limita solo a medir la huella de carbono, sino que también abarca otros impactos ambientales como el consumo de agua y la eutrofización, que se generan durante el proceso de producción de la carne.
Esta iniciativa, que combina esfuerzos público-privados, tiene como finalidad satisfacer las demandas crecientes de los consumidores y abrir nuevas oportunidades comerciales, al tiempo que se asegura la sostenibilidad de la industria cárnica en Argentina. El proyecto involucra a 25 frigoríficos exportadores, cada uno de ellos con tres proveedores, lo que implica evaluar un total de 75 sistemas ganaderos.
La idea es que cada frigorífico cuente con información precisa sobre el impacto ambiental de su producción y pueda certificar la sostenibilidad de su carne. Se toma en cuenta el ciclo de vida completo, desde los insumos utilizados en la producción hasta el transporte de las reses al frigorífico y la exportación de la carne. También se considera el período de gestación de las vacas antes de llegar al establecimiento ganadero.
Este enfoque en la sustentabilidad surge en respuesta a las demandas ambientales de los consumidores y a las regulaciones más estrictas de los mercados internacionales. La Unión Europea, por ejemplo, exige que la importación de proteína no esté relacionada con la deforestación, lo que coloca a Argentina en una posición favorable en términos de su huella ambiental.
No obstante, es fundamental contar con información precisa y confiable para demostrar la sustentabilidad de la producción de carne argentina y así mantener la ventaja competitiva en los mercados internacionales.
El compromiso de la industria cárnica argentina de medir y certificar su impacto ambiental no solo contribuirá a conquistar nuevos mercados, sino que también asegurará la sostenibilidad a largo plazo de esta importante industria en el país.